Argentina se coronó ante Francia en un partido digno de alquilar balcones.
Argentina 3 (4) – (2) 3 Francia.
El pie derecho de Gonzalo Montiel fulminó a la Francia ahora ex campeona del Mundo. No merecimos sufrir, lluvia de goles en un partido único en el Lusail Stadium, estadio que quedará en la historia. Haciendo un análisis del partido, fue un tanto injusto, nuestra selección mereció ganar en los 90’ pero dos errores defensivos dieron cierta emoción al partido que para nosotros fue sufrimiento, y el empate a 2 nos llevaba al tiempo extra, en donde Lionel Andrés Messi nos llenó de alegría con un gol agónico sobre el final, pero al 118’ volvió el empate francés que nos llevó oficialmente a los penales. Desde los 12 metros supimos lo que fue la verdadera agonía, llegó el turno de Montiel, el sufrimiento corría por la piel de cada uno de los millones de argentinos vivos, y los muertos resucitaron, sola y únicamente para ver a Lionel feliz, con la copa que tanto soñó el, vos, yo y todo aquel que sepa y quiera un poquito el fútbol.
Con el diario del lunes podemos festejar, y gritar al cielo: “somos campeones del mundo carajo”.Ya tranquilos, en nuestras casas, lo único que nos queda es agradecer, agradecer a este grupo que nos dio 3 copas en 2 años, que nos suma una estrella más, que nos dio razones para creer, que nos dio vida en un mundial que consideramos perdido en el primer partido, dios mio, que ilusos que somos, como pudimos creer que no lo íbamos a lograr solo por un partido, si tenemos a una mente maestra al mando de todo esto, y a él le debemos todo.
Gracias Scaloni, gracias selección.
Por: Patricio Depaoli.